En el marco del convenio marco entre el Instituto Nacional de Carnes (INAC) y la Sociedad de Arquitectos del Uruguay (SAU), continúa avanzando el proceso de certificación de locales cárnicos en todo el territorio nacional.

La experiencia, desarrollada por el conjunto de colegas registrados que llevan adelante estas certificaciones en todo el país, ha permitido dimensionar la importancia de estas actuaciones profesionales como garantía de las condiciones de salubridad, seguridad y funcionamiento de carnicerías y otros puntos de venta de carnes y derivados.

Dadas las modificaciones introducidas en el “Reglamento Nacional de Carnicería y Locales de Venta de Carnes y Derivados” en noviembre de 2024, de las que surge la no exigencia de presentación de recaudos gráficos, la SAU entiende necesario compartir con las arquitectas y arquitectos que desarrollan estos asesoramientos algunas consideraciones y criterios que se valoran de relevancia: si bien la normativa vigente ya no exige su presentación obligatoria en la certificación, alentamos firmemente a los profesionales a continuar incluyéndolos como parte del informe técnico.

Los recaudos gráficos constituyen herramientas ineludibles para la documentación de las condiciones espaciales, físicas y funcionales de estos locales, tanto en lo que refiere al registro de las condiciones de los mismos en la etapa de relevamiento, como en la forma de expresión de las eventuales adecuaciones a realizar. Su valor trasciende ampliamente a la tramitación de la habilitación, constituyendo un documento de enorme valor para los propietarios o responsables para la gestión futura del local, para la planificación de mejoras y como garantía de cumplimiento sostenido de los estándares requeridos.

Por estas razones, y más allá de estos cambios en las exigencias establecidas (para cuyo revertimiento la SAU ya se encuentra trabajando), convocamos al colectivo de colegas que están trabajando en el marco de este convenio a continuar elaborando y presentando las piezas gráficas de los locales de venta de carnes y derivados a ser habilitados. El adecuado desarrollo de estas actuaciones profesionales, la responsabilidad técnica asumida y la calidad del servicio brindado a nuestros clientes no puede ni debe comprometerse por estos cuestionables cambios de requisitos.

El Arancel propuesto por SAU se encuentra disponible aquí. A esos montos debe sumarse la gestión de la Viabilidad de Uso departamental cuando corresponda y el asesoramiento de ajustes necesarios en el local, según el alcance que establezca cada profesional.

Agradecemos el compromiso de todas y todos los colegas involucrados en esta tarea, y los invitamos a seguir aportando a un proceso que no solo certifica locales, sino que también contribuye a formalizar y mejorar una parte significativa del comercio alimentario del país.