En el marco de la celebración en todo el territorio nacional de la 28° (vigésimo octava) edición del Día del
Patrimonio, que en esta oportunidad recogió el nombre de Concepción  “China” Zorrilla / Cultura de dos Orillas en el año que se cumple un siglo de su nacimiento surge la iniciativa desde SAU Departamental Salto, de reconocer a través de un premio al que se ha denominado PEGUÁ, a aquellos que de una u otra forma protegen el patrimonio, y de esto hace hoy 20 años.

Orígenes

La palabra Peguá es de origen guaraní y significa “proveniente de” y fue el término elegido en su momento para sintetizar todo lo que significa el reconocimiento a lo que hace identidad para una cultura, una sociedad. Es por esta razón que se eligió otorgar este premio a personas, instituciones o edificios que merezcan ser destacados por su aporte a la conservación y puesta en valor del patrimonio salteño.
La primer edición (2002) reconoció a la Sra. Isidra Solari, la segunda (2003) a la Comisión Honoraria del Patrimonio Histórico de Salto, la tercera (2004) fue para el Esc. Enrique Cesio y la cuarta (2005) para la Sociedad Italiana de Salto. La quinta edición (2006) fue a la obra del Ing. Eladio Dieste en Salto, en el año que se homenajeaba su figura (destacada como
“El señor de los ladrillos”) y fue entregada a su hijo, el Arq. Esteban Dieste como reconocimiento a la profunda huella que dejó en nuestra ciudad.

En el presente 2022 el espíritu fue rescatar esas viejas costumbres retomando la premiación en la cual los arquitectos socios, reconocemos la labor en favor del patrimonio destacando todas aquellas acciones que se esfuerzan en proteger nuestros valores locales, siempre expuesto o amenazados con el olvido con una sexcta edición que homenajeó a un grupo de personas que han tomado la responsabilidad de mantener no solo un edificio, sino todo lo vivido y
acumulado a lo largo de los años en él.

Premio 2022

Así el premio correspondió para la Asociación Amigos de LAS NUBES, quienes se han puesto la tarea de conservar la integridad de este valioso  edificio, obras de arte, artículos domésticos, fiestas y celebraciones, experiencias vividas, recuerdos , que nos ayudan a no perder un pasado particular que se ha hecho común a todos : esta casa, la casa de Enrique
Amorín y Esther Haedo.

«Todos sabemos que no solo fue una casa, sino un centro, un faro desde el que se emitió mucho más que los vínculos de la amistad y el buen compartir, sino todo lo que cada invitado y conviviente pudo entregar a la cultura salteña. Reconocemos en el Chalet las Nubes la idea de un hogar, más que una vivienda, que en término de nuestra disciplina arquitectónica es mucho más que sus paredes. Es el conjunto de actividades que se desarrollan en un espacio que a través del tiempo se ha vuelto simbólico» mencionó la Arq. Paula Durán, integrante de la Departamental SAU Salto durante la presentación

En otro extracto la oratoria de SAU Departamental Salto agrega: La institución premiada  ha logrado sostener la infraestructura del Chalet y mantener , y en algunos casos recuperar, el legado que Enrique y Esther dejaron, potenciado además con otros logros que se han sumado y son parte de la construcción de un relato histórico que construye la identidad como la incorporación reciente del archivo de la fotógrafa Isabel Gilbert.